Estadounidense, Nicolas Baker adelantó estudios de biología y periodismo en Francia antes de trabajar para medios franceses como Arte o France 24. A los 32 años fue recientemente vinculado en el CNRS como jefe de redacción audiovisual.

¿QUÉ LO LLEVÓ A FRANCIA?

¡Mi nacimiento! Mis padres son estadounidenses pero nací en Francia. Volvimos a los Estados Unidos cuando tenía 9 años a las afueras de Washington. Hice mis estudios en el liceo francés. Después nos fuimos a Bruselas donde obtuve el bachillerato. Fue allí cuando decidí estudiar biología en Grenoble y posteriormente me inscribí en el ISCPA de Lyon para ser periodista. Recién graduado trabajé en Kabul, Afganistán, específicamente para France 24 y Arte. Después fui a Madagascar donde me convertí en corresponsal para France 24 como periodista-reportero de imagen (JRI). Y hace algunas semanas ingresé al CNRS (Centro nacional de la investigación científica) como jefe de redacción audiovisual.

¿QUÉ LE APORTARON SUS ESTUDIOS EN FRANCIA?

Particularmente me gustó que el sistema escolar francés sea fundado primero en el saber: me parece fundamental que no sirva solo para aprender un oficio. Es mucho más enriquecedor. Hoy en día tengo el verdadero sentimiento de pertenecer a la gran comunidad francófona, con valores comunes, unas bases culturales, así como una concepción de la información a la francesa. Al final de mis estudios me sentía de acuerdo con la filosofía hexagonal. Decidí comenzar los trámites para ser igualmente francés.

¿CUÁL ES SU ROL EN EL CNRS?

Hace algunos meses el CNRS decidió abrir su diario al gran público a través de un portal internet. Hasta entonces era una publicación interna. El objetivo es que el público conozca mejor los grandes avances científicos franceses. Esto implica crear contenidos accesibles para todos y aprovechar todas las posibilidades que ofrece este medio. Como jefe de redacción audiovisual estoy encargado de coordinar la producción de los videos cortos destinados a presentar las actividades del Centro al gran público.

¿QUÉ REPRESENTA PARA USTED EL HECHO DE TRABAJAR PARA UNA INSTITUCIÓN FRANCESA COMO EL CNRS?

Me gusta la manera como Francia y el CNRS en particular, conciben la investigación. Cuando se descubrió el electrón era investigación fundamental. No era rentable a corto plazo y no se sabía para que serviría. Hoy, toda nuestra civilización se basa en el electrón. Existe una belleza en esta búsqueda fundamental de saberes para comprender mejor el mundo. Y Francia logra aún posicionarse en estas temáticas asumiendo que la rentabilización sigue siendo una cuestión secundaria.

¿SE SIENTE MÁS FRANCÉS QUE ESTADOUNIDENSE HOY?

Tengo la suerte de pertenecer a estas dos culturas bien diferentes. Me siento más cercano a mi tierra de adopción en lo que concierne las grandes cuestiones de la vida: educación, laicidad, salud publica... ¡pero también la importancia de comer buen pan! Pero me siento claramente estadounidense cuando se trata de mirar hacia el porvenir con la firme convicción que todo es posible...